Los niños también sufren ansiedad y depresión, lastimosamente no es una enfermedad mental únicamente de adultos, de hecho hay datos que nos muestran que el 80% de los niños y adolescentes han sufrido ansiedad en algún momento de su vida y un 5% sufren depresión. Son datos que llaman mucho la atención y más en una sociedad que aun no le da la importancia suficiente para tratar todas estas enfermedades. A nivel psicológico hace años que los psicólogos o terapeutas hemos notado un crecimiento sustancial en el crecimiento de consultas en relación a estos casos.

Cuando como padres acudimos al psicólogo deberíamos dejar de lado el pensar que nos van a juzgar por la educación que hemos llevado a cabo o que nuestros pequeños superaran todo esto solos, la sintomatología puede ser variada pero si detectas:

  • irritabilidad
  • tristeza frecuente
  • ira u hostilidad
  • disminución por el interés de realizar actividades
  • cansancio, falta de energía
  • odio a si mismo
  • problemas de autoestima
  • taquicardias, sudoración…

Lo más recomendable es ir a un terapeuta sin demorarlo demasiado en el tiempo, ya que cuando antes se empiece esta terapia mejores resultados se consiguen. Cualquier niño merece ser feliz y tener todas las herramientas posible para conseguirlo.